«Te daré todo este poder y el esplendor de estos reinos (…) si tú te postras delante de mí…».
Así se dirige Satanás a Jesús, en la segunda tentación que nos narra el evangelio de este domingo.
La postración es un acto muy intenso. Tenderse en el suelo, boca abajo, y permanecer así por cierto espacio de tiempo.
Espiritualmente, el gesto significa el reconocimiento de la grandeza de aquel ante quien uno se postra y de la propia humildad. Es el mayor acto de adoración. Por eso, Jesús responde:
«Está escrito: Adorarás al Señor, tu Dios, y a él solo rendirás culto.»
Adentrémonos en el camino de la Cuaresma invocando al Espíritu Santo, que condujo a Jesús, para que nos fortalezca en la tentación y consolide nuestra comunión con Dios y los hermanos.
Además:
- Intención del Papa por el mes de marzo: bioética
- Día internacional de la mujer
- San Isidro: hace 400 años, proclamado santo
Domingo 6 de marzo de 2022, I de Cuaresma, ciclo C.
Bendiciones,
+ Heriberto, Obispo de Canelones, Uruguay.